HISTORIA EVOLUTIVA
DEL TEATRO
2 parte:
El teatro es un género literario, ya sea en prosa o en verso,
normalmente dialogado, concebido para ser representado; las artes escénicas
cubren todo lo relativo a la escritura de la
obra teatral, la interpretación, la producción, los vestuarios y escenarios. El término drama
viene de la palabra griega que significa "hacer", y por esa razón se
asocia normalmente a la idea de acción. En términos generales se entiende por drama una historia que narra los acontecimientos vitales
de una serie de personajes. Como el adjetivo dramático indica, las ideas de conflicto, tensión, contraste y emoción se asocian con drama.
El teatro se ha utilizado como complemento de celebraciones
religiosas, como medio para divulgar ideas políticas o para difundir propaganda a
grandes masas, como entretenimiento y también como arte.
ELEMENTOS DE LA REPRESENTACIÓN
TEATRAL
Una representación consta sólo de dos elementos esenciales:
actores y público. La representación puede ser mímica o utilizar el lenguaje verbal.
Los personajes no tienen por qué ser seres humanos; los títeres o el guiñol han
sido muy apreciados a lo largo de la historia, así como otros recursosescénicos.
Se puede realzar una representación por medio del vestuario, el maquillaje, los
decorados, los accesorios, la iluminación,
la música y los efectos especiales. Estos
elementos se usan para ayudar a crear una ilusión de lugares, tiempos,
personajes diferentes, o para enfatizar una cualidad especial de la
representación y diferenciarla de la experiencia cotidiana.
El teatro español,
como el europeo, surge vinculado al culto religioso. La misa, celebración
litúrgica central en la religión cristiana, es en sí misma un ‘drama’,
una representación de la muerte y
resurrección de Cristo. Serán los clérigos los que, en su afán didáctico por
explicar los misterios de la
fe a los fieles mayoritariamente incultos y analfabetos, creen los primeros
diálogos teatrales: los tropos, con los que escenificaban algunos episodios
relevantes de la Biblia. Estas representaciones, que tenían lugar dentro de las
iglesias, en el coro o parte central de la nave, se fueron haciendo más largas
y espectaculares dando lugar a un tipo de teatro religioso que fue el teatro
medieval por excelencia. Poco a poco se fueron añadiendo elementos profanos y
cómicos a este tipo de representaciones que, por razones de decoro, terminaron
por abandonar las iglesias y comenzaron a realizarse en lugares públicos: en
los pórticos y atrios de las iglesias, plazas, calles y cementerios.
En el siglo XIV, el teatro se emancipó del drama litúrgico
para representarse fuera de las iglesias especialmente en la fiesta del Corpus
Christi y evolucionó en ciclos que podían contar con hasta 40 dramas. Algunos
estudiosos creen que, aunque similares a los dramas litúrgicos, los ciclos
surgieron de forma independiente. Eran producidos por toda una comunidad cada
cuatro o cinco años. Las representaciones podían durar de dos días a un mes. De
la producción de cada obra se encargaba un gremio que intentaba que el tema
tuviera que ver con su ocupación laboral;
así los trabajadores de los astilleros podían, por ejemplo, escenificar una
obra sobre Noé.
Como los intérpretes eran con frecuencia aficionados y
analfabetos, las obras se escribían en forma de copla de fácil memorización; no
se conocen los nombres de los dramaturgos.
Durante este periodo, surgieron obras folclóricas, farsas y
dramas pastorales (siempre de autores anónimos) y, por supuesto, persistían
varios tipos de entretenimientos populares. Todo esto influyó en el desarrollo de
los autos durante el
siglo XV. Aunque extrajeran trama y personajes de la teología cristiana,
los autos diferían de los ciclos religiosos en el hecho de que no se trataba de
episodios bíblicos, sino alegóricos, y estaban representados por profesionales
como los trovadores y juglares
TEATRO DEL RENACIMIENTO
La Reforma protestante puso fin al teatro religioso a mediados
del siglo XVI, y un nuevo y dinámico teatro profano ocupó su lugar. Aunque
los autos y los ciclos con su simplicidad parezcan estar muy lejos de los
dramas de Shakespeare y Molière, los temas de la baja edad media sobre
la lucha de la humanidad y las adversidades, el giro hacia temas más laicos y
preocupaciones más temporales y la reaparición de lo cómico y lo grotesco
contribuyeron a la nueva forma de hacer teatro. Además, la participación de
actores profesionales en las obras fue sustituyendo poco a poco a los
entusiastas aficionados.
Como los métodos de producción y representación
clásicos no se conocían perfectamente, el teatro del renacimiento tomó una forma totalmente nueva con
algunos visos de clasicismo. Esta fórmula se conoce generalmente como neoclasicismo.
Las primeras muestras de teatro renacentista en Italia datan del siglo XV. Las primeras
obras eran en latín, pero acabaron por escribirse en lenguavernácula y solían estar basadas en modelos clásicos.
Este teatro no fue una evolución de las
formas religiosas, ni siquiera de las prácticas populares o dramáticas ya
existentes; se trataba de un proceso puramente
académico. Eran obras pensadas para ser leídas, aunque fuera por varios lectores
y en público, y con fines didácticos.
CREACIÓN
DE LA ÓPERA
Las elaboradas exhibiciones escénicas y las historias alegóricas
de los intermezzi, en conjunto con los continuados
intentos de recrear la producción clásica, llevaron a la creación de la ópera a
finales del siglo XVI. Aunque el primer teatro de corte clasicista tenía
un público limitado, la ópera se hizo muy popular. A mediados del
siglo XVII, se estaban construyendo grandes teatros de la ópera en Italia.
Mientras la elite se entretenía con el teatro y el espectáculo
de estilo clasicista, el público en general se divertía con la commedia dell'arte, un teatro
popular y vibrante basado en la improvisación.
A finales del siglo XVI era popular en Francia un tipo
de comedia similar a la farsa. Este fenómeno dificultó el establecimiento total
del drama renacentista. En aquel tiempo no
existían en París edificios expresamente dedicados al teatro; se utilizaban con
ese propósito recintos destinados aljuego de pelota.
La fuerte influencia italiana en Francia llevó a popularizar representaciones
que fueron denominados ballets.
Molière está considerado
como el gran dramaturgo francés. Sus farsas y comedias de costumbres reciben en
su mayoría una influencia directa de lacommedia dell’arte, pero
generalmente van más allá de su objetivo específico y podrían considerarse como
observaciones sobre las limitaciones y errores del género humano. Muchas de sus
obras están imbuidas de una cierta amargura.
Molière fue también un actor cómico de excepción en su tiempo, y
trabajó con el objetivo de alterar el estilo histriónico y ampuloso que
entonces dominaba la escena francesa.
TEATRO
ISABELINO INGLÉS Y DE LA
RESTAURACIÓN
El teatro renacentista inglés se desarrolló durante el reinado
de Isabel I a finales del siglo XVI. En aquel tiempo, se escribían
tragedias academicistas de carácter neoclásico que se representaban en las
universidades; sin embargo, la mayoría de los poetas isabelinos tendían a
ignorar el neoclasicismo o, en el mejor de los casos, lo usaban de forma
selectiva. A diferencia del teatro continental (creado con el objetivo de ser
presentado ante un público de elite) el teatro inglés se basó en formas
populares, en el vital teatro medieval, y en las exigencias del público en
general.
Las obras se representaban durante los meses más cálidos en
teatros circulares y al aire libre.
Bajo la influencia del clima de cambio político
y económico en la Inglaterra del momento, así como de la evolución
de la lengua, dramaturgos comoThomas
Kyd y Christopher Marlowe dieron
lugar al nacimiento de un teatro dinámico, épico y sin cortapisas que culminó
en el variado y complejo trabajo del más
grande genio del teatro
inglés, WILLIAM SHAKESPEARE.
TEATRO
ESPAÑOL DEL SIGLO DE ORO
El siglo XVII fue el Siglo de Oro del teatro
en España.
Este siglo acota uno de los periodos más fértiles de la dramaturgia universal,
si bien la propia forma de denominar esta época ha sido conflictiva de unos
países a otros.
Se crean las primeras salas teatrales llamadas corrales de
comedias, que eran gestionadas por las hermandades, verdaderos precedentes del empresarioteatral moderno. Van a proliferar los autores, las
obras y las compañías. El teatro deja de ser un acontecimiento restringido para
convertirse en unproducto competitivo,
sujeto a las leyes de la oferta y la demanda. Un interesante debate teórico
acompaña el nacimiento y desarrollo de esta forma nueva de entender el teatro.
Dos autores de la época nos sirven para ilustrar el sentido y la evolución de
este debate y del arte teatral: CERVANTES yLOPE DE VEGA.
El teatro del siglo XVIII era, básicamente, y en gran parte
de Europa,
un teatro de actores. Estaba dominado por intérpretes para quienes se escribían
obras ajustadas a su estilo; a menudo estos actores adaptaban clásicos para
complacer sus gustos y adecuar las obras a sus características. Las obras deShakespeare,
en especial, eran alteradas hasta no poder ser
reconocidas no sólo para complacer a los actores sino, también, para ajustarse
a los ideales neoclásicos. A El
rey Lear y Romeo y Julieta, por ejemplo, se les cambiaron los
finales trágicos por unos felices, anulando por lo tanto la intencionalidad del
autor.
A lo largo del siglo XVIII ciertas ideas filosóficas fueron
tomando forma y finalmente acabaron fusionándose y cuajando a principios del siglo XIX, en un movimiento llamado romanticismo.
El romanticismo apareció en primer lugar en Alemania, un país con poca tradición teatral antes del
siglo XVIII, aparte de rústicas farsas. Alrededor de 1820, el romanticismo
dominaba el teatro en la mayor parte de Europa.
El teatro romántico español buscó la inspiración en los temas
medievales y presenta a un héroe individual dominado por las pasiones, ya sean
éstas virtuosas o viciosas. Se recuperan las formas y estructuras del
teatro del Siglo de Oro pero con una maquinaria escénica y efectos
escenográficos suntuosos y aparatosos. La voz engolada y el verso rotundo
triunfa en el teatro romántico español. Su gran figura es José Zorrilla, el autor de Don
Juan Tenorio. El tema del
burlador es retomado con gran libertad por
Zorrilla y en su entusiasmo romántico hace que sea el amor quien
redime al seductor. La fuerza y encanto
de este personaje y obra ha conseguido que nunca haya dejado de representarse
en algún teatro español.
Las mismas fuerzas que condujeron al romanticismo también, en
combinación con varias formas populares, condujeron al desarrollo del
melodrama, el género dramático más arraigado en el siglo XIX. El melodrama
como literatura es a menudo ignorado o ridiculizado,
cuando menos desdeñado por los críticos, porque aporta imágenes de villanos que se atusan el bigote o
heroínas sujetas a vías de tren.
Proponía una recreación de
lo local y de la vida en el hogar. El espectador debía tener la impresión de
asistir a un hecho real y a ello vino a contribuir el escenario de tres paredes
con el objetivo de que el público observe a través de la imaginaria cuarta
pared.
NATURALISMO Y CRÍTICA SOCIAL
A mediados del siglo XIX el interés por
el detalle realista, las motivaciones psicológicas de los personajes, la
preocupación por los problemas sociales, condujo al naturalismo en el teatro.
Acudiendo a la ciencia en busca de inspiración, los
naturalistas sintieron que el objetivo del arte, como el de laciencia, debía ser el de
mejorar nuestras vidas. Los dramaturgos y actores, como los científicos, se
pusieron a observar y a retratar el mundo real.
El naturalismo es responsable en gran medida de la aparición de
la figura del director teatral moderno. Aunque todas las producciones teatrales
a lo largo de la historia fueron organizadas y unificadas por un individuo, la idea de un
director que interpreta el texto, crea un estilo de
actuación, sugiere decorados y vestuario y da cohesión a la producción, es algo
moderno.
Las obras demuestran problemas sociales como la enfermedad genética, la ineficacia del matrimonio como
institución religiosa y social, y los derechosde las mujeres, pero también son
valiosos por sus convincentes estudios de individuos.
TEATRO
DEL SIGLO XX
Desde el renacimiento en adelante, el teatro parece haberse
esforzado en pos de un realismo total, o al menos en la ilusión de la
realidad. Una vez alcanzado ese objetivo a finales del siglo XIX, una
reacción antirrealista en diversos niveles irrumpió en el mundo de la escena.
Los simbolistas hicieron una llamada a la
"desteatralización" del teatro, que se traducía en desnudar el teatro
de todas sus trabas tecnológicas y escénicas del siglo XIX,
sustituyéndolas por la espiritualidad que debía provenir del texto y la
interpretación. Los textos estaban cargados de simbología de difícil
interpretación, más que de sugerencias. El ritmo de las obras era en general
lento y semejante a un sueño.
El movimiento expresionista tuvo su apogeo en las dos primeras
décadas del siglo XX, principalmente en Alemania. Exploraba los aspectos
más violentos y grotescos de la mente humana, creando un mundo de pesadilla
sobre el escenario. Desde un punto de vista escénico, el expresionismo se caracteriza por la distorsión, la
exageración y por un uso sugerente de la luz y
la sombra.
Quizás se deba a la influencia de Antonin Artaud la
aparición de una serie de grupos de
teatro durante la década de 1960. Como ejemplo podemos citar al Teatro Laboratorio de Jerzy Grotowski y el Teatro de la
Crueldad de Peter Brook.
De la segunda guerra mundial nació el teatro del absurdo,
el sentido de lo absurdo que hizo llevadero un mundo destruido y desilusionado.
Lo absurdo, lo que carece de lógica, lo que de ningún
modo se puede vincular o relacionar con un texto dramático o un contexto
escénico, es lo característico de este teatro en el que no hay acción
consecuente, ni caracteres, porque la vida misma de los personajes carece de
sentido.
El teatro realista continuó vivo en el ámbito comercial, sobre
todo en Estados Unidos. Sin embargo, el objetivo
parecía ser el realismo psicológico, y se emplearon para este fin recursos
dramáticos y escénicos no realistas. Existen obras basadas en la memoria, secuencias sobre
sueños, personajes puramente simbólicos, proyecciones y otros recursos
similares. Incorporan diálogos poéticos y un fondo sonoro cuidadosamente
orquestado para suavizar el realismo crudo. La escenografía era más sugerente
que realista.
En la década de 1920 los musicales surgieron a partir de una
libre asociación en forma de serie de canciones, danzas, piezas cortas cómicas
basadas en otras historias, que algunas veces eran serias, y se contaban a
través del diálogo, la canción y la danza. Un grupo a cargo de Richard Rodgers y Oscar Hammerstein II perfeccionó
esta forma en la década de 1940. Ya durante la década de 1960 gran parte del
espectáculo había dejado el musical para convertirse en algo más serio, incluso
sombrío. A finales de la década siguiente, sin embargo, posiblemente como
resultado de crecientes problemas políticos y económicos (de los que el público
deseaba escapar), volvieron los musicales (muchos de ellos reposiciones) bajo
un signo de desmesura y lujo, haciéndose hincapié en la canción, el baile y la
comedia fácil.
EL TEATRO ORIENTAL
El teatro oriental en general (de la India, China, Japón y el Sureste asiático) tiene ciertas
características en común que lo distinguen claramente del teatro
posrenacentista occidental. El teatro asiático es presentacional, ya que la
idea de representación naturalista es del todo ajena a él. Aunque los teatros de
los diferentes países varían, en general son obras integradoras de las diversas
artes (una realización de la idea del teatro total de Wagner) que mezclan
literatura, danza, música y espectáculo.
El teatro indio en sánscrito floreció en los siglos IV y V.
Las piezas, complejas y épicas, estaban estructuradas sobre la base de nueve rasas, o humores, más que en
los personajes, ya que el eje de las obras eran las cuestiones espirituales.
Los escenarios tenían una decoración laboriosa, pero no se usaban técnicas
representacionales. Los movimientos de cada parte del cuerpo, la recitación y
la canción estaban rígidamente codificadas. Las marionetas y el teatro danzado,
especialmente el kathakali, han sido también muy apreciados en
varios momentos de la historia de la India.
En otros lugares del Sureste asiático, el teatro de marionetas
es la forma dominante, en especial el wayang
kulit, o marionetas de
sombras, en Java. En algunos sitios las marionetas son tan
apreciadas que los actores estudian sus movimientos para imitarlos.
El teatro chino empezó a desarrollarse en el siglo XIV; era
muy literario y tenía convenciones muy estrictas. Desde el siglo XIX, sin
embargo, ha sido dominado por la ópera de Pekín. En ella se da una importancia
primordial a la interpretación, el canto, la danza y las acrobacias más que al
texto literario. De hecho, la representación puede describirse como una colección
de extractos de varias obras literarias combinados con una exhibición
acrobática. La acción tiende a ser oscura y el énfasis se centra en la
habilidad de los actores. El escenario es una plataforma desnuda con el
mobiliario estrictamente necesario. Las acciones son estilizadas, los papeles
codificados y el maquillaje es elaborado y grotesco; los colores son
simbólicos. Bajo elgobierno comunista
la temática ha cambiado, pero el estilo ha seguido siendo más o menos el mismo.
El teatro japonés comenzó en el siglo VII (d.C.) y es quizá el
más complejo de Oriente. Sus dos géneros más conocidos son el teatro nô y el kabuki. Nô, el teatro clásico japonés es estilizado; la síntesis de
danza-música-teatro extremadamente controlada intenta evocar un ánimo
particular a través del relato de un hecho o historia. Está muy relacionado con
el budismo Zen.
El apogeo del nô tuvo lugar en el siglo XV. El kabuki data del
siglo XVI y es más popular en estilo y contenido. Otros géneros dramáticos
japoneses son el bugaku, un refinado teatro danzado, así como
un teatro de marionetas o muñecos llamado bunraku, en el que los intérpretes sobre el
escenario manipulan unas marionetas casi de tamaño natural. Todas las formas
dramáticas se apoyan en el ritual, la danza y la tradición. Son elegantes y
bellas, y ponen el énfasis en valores opuestos a los del teatro occidental.
MITOS Y
LEYENDAS DEL TEATRO
Antes de pasar al teatro, veamos algunos de los mitos en los que
se basan las ceremonias preteatrales comenzando con las culturas orientales más
influyentes en occidente:
En el antiguo Japón, Amaterasu, diosa del Sol, molesta con su hermano Susano, decide encerrarse en una profunda cueva. En ese instante desaparece la luz de la faz de la tierra. Los dioses imaginan un modo de hacerla salir para devolver la claridad a la tierra. A la entrada de la cueva, donde está escondida Amaterasu, hay un árbol y allí cuelgan atractivos adornos, joyas, espejos, mientras que interpretan un danza con flautas y tambores. Ante tan espectacular montaje, en donde intervienen una gran variedad de lenguajes teatrales, Amaterasu se enternece y sale de la gruta, así el mundo vuelve a iluminarse.
En el Tibet, las primitivas formas religiosas budistas tienen lugar en una serie de misterios tibetanos que se representaban en monasterios y prados. En un escenario entoldado, se recitaban glosas salmodiadas con sus notas humorísticas, a cargo de « diablos » o personajes de baja condición social.
En la India, Brahma (dios creador del hinduismo) añadió a sus cuatro libros sagrados un quinto dedicado al teatro, El Natyaveda, que trata de la danza, el canto, la mímica y las pasiones.
(Texto de Brahma)
« El teatro, don del cielo para guía del hombre:
Y dijo Brahma:
El teatro describe las manifestaciones de este Triple mundo en su totalidad : La ley tanto como el juego, y la riqueza, y la quietud, y la risa, y la guerra, y la pasión, y la muerte violenta. Ley para quienes la ley siguen, pasión para quienes a la pasión se entregan, disciplina para quienes al mal se encaminan, autodominio para quienes a sí mismos saben conducirse.
Y pues se reviste de las manifestaciones varias de la vida, encarnando las diversas fases de la acción, yo, Brahma, he construido este Teatro en conformidad con el movimiento del mundo.
De este modo, por medio de los sabores, los sentimientos y sus modos todos de movimiento, este Teatro será para todos fuente de enseñanzas.
A los acosados por las desdichas, penas y trabajos; a los abrasados por un fuego interior: a todos ofrecerá el Teatro un refugio en esta vida. Porque al mostrar los senderos de la ley, de la gloria, de la longevidad y de la gracia, y al fortalecer la inteligencia, este Teatro será para todos fuente de enseñanzas. Que no hay conocimiento, ni oficio, ni ciencia, ni arte, ni forma de actividad, ni método que no deje visibles este teatro.
No debemos ignorar que el teatro representa las acciones completas de los dioses y los titanes, de los reyes y del pueblo, así como de los Profetas de la palabra sagrada. Todas las naturalezas individuales del mundo, con sus mezclas de dicha y de desdicha, representadas por la mímica corporal y los demás medios de expresión: esto es lo que se entiende por Teatro.
Al Saber sagrado, a la ciencia y a los mitos, proporcionará un lugar de audiencia, y a la muchedumbre un divertimento: tal ha de ser el Teatro. »
En el antiguo Japón, Amaterasu, diosa del Sol, molesta con su hermano Susano, decide encerrarse en una profunda cueva. En ese instante desaparece la luz de la faz de la tierra. Los dioses imaginan un modo de hacerla salir para devolver la claridad a la tierra. A la entrada de la cueva, donde está escondida Amaterasu, hay un árbol y allí cuelgan atractivos adornos, joyas, espejos, mientras que interpretan un danza con flautas y tambores. Ante tan espectacular montaje, en donde intervienen una gran variedad de lenguajes teatrales, Amaterasu se enternece y sale de la gruta, así el mundo vuelve a iluminarse.
En el Tibet, las primitivas formas religiosas budistas tienen lugar en una serie de misterios tibetanos que se representaban en monasterios y prados. En un escenario entoldado, se recitaban glosas salmodiadas con sus notas humorísticas, a cargo de « diablos » o personajes de baja condición social.
En la India, Brahma (dios creador del hinduismo) añadió a sus cuatro libros sagrados un quinto dedicado al teatro, El Natyaveda, que trata de la danza, el canto, la mímica y las pasiones.
(Texto de Brahma)
« El teatro, don del cielo para guía del hombre:
Y dijo Brahma:
El teatro describe las manifestaciones de este Triple mundo en su totalidad : La ley tanto como el juego, y la riqueza, y la quietud, y la risa, y la guerra, y la pasión, y la muerte violenta. Ley para quienes la ley siguen, pasión para quienes a la pasión se entregan, disciplina para quienes al mal se encaminan, autodominio para quienes a sí mismos saben conducirse.
Y pues se reviste de las manifestaciones varias de la vida, encarnando las diversas fases de la acción, yo, Brahma, he construido este Teatro en conformidad con el movimiento del mundo.
De este modo, por medio de los sabores, los sentimientos y sus modos todos de movimiento, este Teatro será para todos fuente de enseñanzas.
A los acosados por las desdichas, penas y trabajos; a los abrasados por un fuego interior: a todos ofrecerá el Teatro un refugio en esta vida. Porque al mostrar los senderos de la ley, de la gloria, de la longevidad y de la gracia, y al fortalecer la inteligencia, este Teatro será para todos fuente de enseñanzas. Que no hay conocimiento, ni oficio, ni ciencia, ni arte, ni forma de actividad, ni método que no deje visibles este teatro.
No debemos ignorar que el teatro representa las acciones completas de los dioses y los titanes, de los reyes y del pueblo, así como de los Profetas de la palabra sagrada. Todas las naturalezas individuales del mundo, con sus mezclas de dicha y de desdicha, representadas por la mímica corporal y los demás medios de expresión: esto es lo que se entiende por Teatro.
Al Saber sagrado, a la ciencia y a los mitos, proporcionará un lugar de audiencia, y a la muchedumbre un divertimento: tal ha de ser el Teatro. »
Eunuco: en la historia antigua y oriental ministro o empleado favorito de un rey
En el Antiguo Testamento encontramos referencias al
arte escénico como las danzas de los levitas o el fascinante libro, modelo de
drama erótico-místico que es El Cantar de los Cantares. El teatro
occidental desde la Edad Media, acudirá a la Biblia, no sólo en busca de temas
e historias, sino también de lenguajes y formas teatrales.En el Antiguo Egipto
ya había manifestaciones dramáticas en el año 2.000 aC., en la mayoría de los
casos presididas por el conocido culto a la muerte que la civilización egipcia
profesaba. La más famosa de estas celebraciones tenía lugar en
torno a Osiris, y se desarrollaba en el desierto, delante o en el interior de
un templo. La duración era de ocho días y los intérpretes – sacerdotes y
pueblo – llevaban gran cantidad de adornos corporales, como pelucas, trenzas y
colores fuertes para el rostro, empleando la anilina para azular los ojos, se
vestían con ropas blancas y transparentes para las muchachas.
1 comentario:
En los tipos de teatro, te ha faltado el gran teatro de la vida, jajaja, donde cada uno de nosotros representamos un papel predeterminado y alguien desde arriba nos mueve con hilos. O quizás ese teatro que es el mundo donde los humanos actuamos. Cada uno representa el papel que elige.
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